martes, 4 de enero de 2011


Casa Museo Isleña


En este lugar, desde hace tres años, Febra García recrea la típica y colorida arquitectura de la isla.

¿Desde niña, mi mamá se quejaba porque en San Andrés no existía nada que mostrara la cultura isleña, mientras que otros pueblos sí se preocupaban por conservar su historia y sus reliquias. Por eso, un día decidí hacer una réplica exacta de la casa de mi abuela¿, comenta Febra.

Así, con sus altos techos cubiertos con láminas de zinc y un corredor que la atraviesa, esta construcción en madera pura da lecciones de un diseño empírico donde, por ejemplo, el manejo de la temperatura es perfecto y sin necesidad de sofisticados aires acondicionados.

El recorrido... En el primer piso, los muebles de la época recrean la sala y el comedor, así como la habitación principal ¿para los padres¿ adornada con el respectivo aguamanil. Caminando hacia el patio se encuentra el cuarto de la ropa, en el que se destaca un armario de la época ¿donado por un vecino¿ donde zapatos y sombreros son guardados celosamente, al lado de otros objetos.
En la segunda planta... un gran salón muestra los trajes formales de antaño y el área de costura con la máquina de pedal. Con el calor y la jovialidad de la isla contrastan ¿además¿ la formalidad de los sacolevas de pesado paño negro y los vestidos de satín con manga larga y falda al piso.
En el único cuarto del segundo piso... donde dormían los hijos de las prolíficas familias, hoy se exhiben las herramientas para medir y recoger los cocos que se exportaban ¿y eran la base de la economía¿ y algunos gramófonos con sus discos.

Accesorios que recrean toda una historia... Así mismo, los cuadros con fotografías antiguas que aparecen en cada rincón dan testimonio de la vida diaria y las celebraciones que protagonizaron los personajes del momento. Por supuesto, los generosos balcones permiten apreciar una soberbia vista al mar.
Espacios para la arquitectura

La cocina.
Como lo dictaba la sabiduría popular, se levanta en el patio trasero para evitar accidentes con el fogón de leña que, incluso, también estaba un poco fuera de este espacio.

La cisterna. Para almacenar el agua, y los sanitarios son espacios que también están alejados de la casa principal. Los sanitarios son dobles y construidos en madera sobre un pozo séptico.
La parcela. Sobre la que se levantaba la vivienda era una especie de granja autosostenible. Las tiendas no eran necesarias pues cada hogar tenía, cuando menos, una mata de plátano y otras de yuca y coco, así como algunas especias.

Hoy las construcciones son muy diferentes a las de 1800. Los condominios de apartamentos fueron las últimas obras que se levantaron en la isla y que esperan retomar su fuerza cuando se amplíe la red de servicios públicos. Por ahora, sólo hay remodelaciones en algunos hoteles.
Datos extraidos de: